February 15, 2024
Piense en todo lo que un niño podría hacer en un día. Van a la escuela, practican deportes, practican un instrumento, hacen los deberes y socializan con amigos y familiares. Después de un día ocupado, sus cuerpos necesitan descansar. Sin embargo, la Encuesta de Prevención de Riesgos y Salud en Estudiantes (SHARP) de 2023 encontró que solo el 38,4% de los jóvenes de Utah informaron haber dormido 8 horas o más en una noche escolar promedio. Esa es la cantidad recomendada de sueño que los niños necesitan para tener una salud óptima.
Nuestros niños y adolescentes tienen dificultades para dormir lo suficiente cada noche, y el gran volumen de tiempo frente a la pantalla y el uso de las redes sociales no ayuda.
Los niños necesitan dormir. Les restaura la energía, recarga sus cuerpos y les ayuda a retener información. Dormir es fundamental para prevenir problemas de salud mental y de atención o de comportamiento. Como adultos, los efectos de no dormir lo suficiente son evidentes en la forma en que nos sentimos al día siguiente. Nos sentimos más malhumorados, menos concentrados, menos enérgicos y menos capaces de participar en las actividades que disfrutamos. Los niños también sienten esto y necesitan dormir incluso más que los adultos.
Cómo las redes sociales impactan negativamente el sueño
Casi la mitad de los adolescentes dicen que usan el internet “casi constantemente” y casi 1 de cada 3 adolescentes usa las pantallas hasta la medianoche o más tarde, los padres, educadores y cuidadores deben ser conscientes del impacto que tienen las redes sociales en la salud emocional y en el sueño. Las redes sociales a menudo cortan el tiempo que debería dedicarse al sueño, y esta interrupción del sueño tiene efectos nocivos en la salud mental, física y emocional de niños y adolescentes.
Específicamente en TikTok, el 19% de los usuarios de 13 a 15 años de la aplicación y el 25% de sus usuarios de 16 a 17 años en todo el mundo están activos en TikTok entre la medianoche y las 5:00 a.m. TikTok envía notificaciones automáticas directamente a los teléfonos de los usuarios, tanto durante las horas escolares como durante las horas de dormir.
En Utah, la encuesta SHARP de 2023 preguntó a 52.000 estudiantes de todo el estado sobre su uso del tiempo frente a la pantalla. Casi el 80 % (79,8 %) de los estudiantes de Utah informaron pasar dos o más horas al día frente a las pantallas (sin contar el trabajo escolar), en comparación al 66,7 % en 2019. Los resultados también mostraron una fuerte relación entre el tiempo frente a la pantalla y la falta de sueño, los pensamientos suicidas y el consumo de sustancias.
Los datos muestran que el uso de la tecnología, especialmente las redes sociales, dentro de una hora antes de acostarse se asocia con interrupciones del sueño. Existen asociaciones entre el uso de medios digitales y el retraso en el sueño, la somnolencia diurna, la duración y calidad del sueño y la deficiencia del sueño en jóvenes de 16 a 25 años. La falta de sueño y el sueño insuficiente pueden influir en el desarrollo neurológico y son factores de riesgo de depresión, pensamientos suicidas, alteraciones del estado de ánimo, lesiones, problemas de atención y aumento excesivo de peso.
En mayo de 2023, El Cirujano General de los EE.UU. publicó un aviso sobre las redes sociales y la salud emocional de los jóvenes. El aviso subrayó el efecto nocivo de las redes sociales sobre el sueño, afirmando que el uso excesivo o incontrolable de las redes sociales se ha relacionado con problemas de sueño y atención y sentimientos de exclusión entre los adolescentes. Cada vez más jóvenes pasan tiempo frente a sus dispositivos electrónicos y esto está afectando su calidad y cantidad de sueño, así como su salud emocional.
Escuche a los expertos
Dra. Michelle Hofmann es madre, pediatra y directora médica ejecutiva de Servicios Clínicos del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Utah. Ella dice que no dormir lo suficiente también afecta la capacidad de los niños para tener éxito en la escuela, los deportes y las relaciones.
“Piense en lo brillantes que son esas pantallas. Realmente nos mantienen despiertos y alerta y son realmente perjudiciales para los ciclos del sueño”, dice la Dra. Hofmann. “Ellos [los niños] necesitan ese tiempo y las distracciones de los teléfonos y las luces brillantes en la habitación son realmente perjudiciales para la salud del sueño”.
Mandy Chapple es la directora del Granite Technical Institute en South Salt Lake. Regularmente realiza investigaciones sobre el comportamiento de los estudiantes en línea y presta atención a cuándo los estudiantes tienden a publicar.
“Me daré cuenta cuando los estudiantes publican esos mensajes y, a menudo, es en medio de la noche”, dice Chapple. “1 am, 2 am, 3 am, 4 am Se puede ver el tipo de interrupción que esto genera para los estudiantes cuando intentan dormir lo que necesitan, y luego llegan a la escuela sin dormir porque simplemente están frente a sus teléfonos todo el día y, a veces, por la noche”.
¿Qué pueden hacer los padres?
“Es realmente fundamental trasladar los teléfonos a la cocina para alejarlos del dormitorio”, dijo el Dra. dice Hofmann. Y no sólo para los niños, sino también para los adultos. Los dispositivos electrónicos pueden ser una distracción después de acostarse e interferir con el sueño. Considere restringir el uso de teléfonos, tabletas y computadoras al menos una hora antes de acostarse y durante toda la noche.
Algunas otras tácticas que los padres pueden implementar para reducir el tiempo que sus hijos pasan frente a la pantalla por la noche son:
- Enseñe a los niños sobre la tecnología y capacítelos para que la utilicen de manera responsable a la edad adecuada. Converse con ellos sobre cómo pasan su tiempo en línea y anímelos a buscar ayuda si la necesitan.
- Trabaje con otros padres para establecer normas similares sobre el uso del teléfono durante la noche. A pesar de lo que puedan decir sus hijos, usted no es el único padre que no permite que sus hijos usen las redes sociales por la noche o que establece reglas familiares sobre teléfonos y tecnología.
- Modele usted mismo un comportamiento responsable en las redes sociales limitando su propio uso y siendo consciente de los hábitos de las redes sociales, especialmente por la noche.
Cuanto más sepamos, más podremos ayudar a nuestros hijos creando un ambiente de apoyo, seguro y saludable en casa.